Vitaminas y minerales


Un suplemento de vitaminas y minerales proporciona una variedad de nutrientes que también se encuentran en los alimentos. Estos suplementos a menudo se llaman multivitamínicos. Vienen en forma de pastillas, comprimidos masticables, en polvo o líquidos.
Un multivitamínico estándar suele contener:
- Vitaminas solubles en agua. Estas vitaminas entran y salen del cuerpo con facilidad. La mayoría no se acumulan en las células del cuerpo. Las vitaminas solubles en agua incluyen la vitamina C y las vitaminas del complejo B: tiamina, riboflavina, niacina, ácido pantoténico, vitamina B6, biotina, ácido fólico y vitamina B12.
- Vitaminas solubles en grasa (liposolubles). Estas vitaminas se almacenan en las células del cuerpo y no salen del cuerpo con tanta facilidad como las vitaminas solubles en agua lo hacen. Las vitaminas liposolubles incluyen las vitaminas A, D, E y K.
Minerales. Estos incluyen calcio, cobre, hierro, magnesio, fósforo, potasio, selenio y zinc. - Algunos multivitamínicos también contienen otros ingredientes que no son vitaminas ni minerales. Estos incluyen sustancias como los antioxidantes luteína y licopeno.
¿Por qué tomar un suplemento?
La mejor manera de obtener las vitaminas y minerales que el cuerpo necesita es comiendo una amplia variedad de alimentos saludables. Las frutas, verduras, granos integrales, leche, productos lácteos y pescado como parte de un plan alimenticio nutritivo. Un suplemento no puede compensar los malos hábitos alimentarios. Pero, a veces, aun a las personas que tienen hábitos alimentarios saludables les resulta difícil comer todas las frutas, verduras y demás alimentos que necesitan. Un suplemento puede ayudar a compensar las deficiencias.
Ciertas personas son más propensas a necesitar un suplemento. Estas incluyen:
– Personas que siguen una dieta limitada en calorías, la cual no proporciona suficientes vitaminas y minerales.
– Mujeres que están embarazadas o amamantando.
– Gente que está enferma, herida, o que está recuperándose de una cirugía.
– Bebés, especialmente para asegurarse de que están recibiendo las cantidades adecuadas de calcio y vitamina D.
– Gente que no puede o no quiere comer una variedad de alimentos, como las personas que tienen alergias a los alimentos o las que siguen una dieta vegetariana.
¿Qué pasa con los suplementos que están etiquetados para ciertas personas (como las mujeres o los ancianos)?
Muchos suplementos se anuncian como diseñados especialmente para hombres o para mujeres o para determinados grupos de edad. Un multivitamínico estándar es apropiado para la mayoría de las personas que toman un suplemento. Pero algunas personas prefieren tomar un suplemento que esté hecho para su sexo o grupo de edad.
Los tipos de suplementos especializados incluyen:
- Fórmulas para las mujeres. Los suplementos para las mujeres tienen hierro adicional. Esto es porque las mujeres que aún tienen períodos menstruales necesitan más hierro que los hombres. Pero después de la menopausia, las necesidades de hierro de las mujeres son las mismas que las de los hombres. Algunas fórmulas para mujeres también contienen calcio adicional, ya que las mujeres son más propensas a tener osteoporosis que los hombres.
- Fórmulas para los hombres. Estas tienen un menor contenido de hierro, dado que los hombres necesitan menos hierro que las mujeres.
- Fórmulas para adultos mayores. Estas están elaboradas para adultos de edad más avanzada y suelen tener menos hierro y vitamina K, y más vitamina B12 y vitamina D.
- Fórmulas prenatales. Estas están elaboradas para mujeres que están embarazadas, que planean quedar embarazadas o que están amamantando. Los suplementos tienen ácido fólico y hierro adicionales. El ácido fólico es especialmente importante porque puede ayudar a prevenir ciertas anomalías congénitas, sobre todo anomalías congénitas del tubo neural. A veces, estos suplementos también tienen más calcio.
Los nutricionistas alertan de que cada vez hay más personas sobrealimentadas y a la vez malnutridas.
Es paradójico. Vivimos en la sociedad de la abundancia y sin embargo, cada vez hay más personas que sufren déficit de vitaminas y minerales. Esto es lo que se conoce como “la doble carga de la malnutrición”. Calcio, hierro, potasio, vitaminas A,D y ácido fólico son algunos de los nutrientes que, según las autoridades en nutrición, escasean en la dieta de varios segmentos de la población. Sin embargo, sobran alimentos ricos en sodio, grasas y azúcares añadidos.